Hablemos hoy de un sol que hoy no se ha puesto, de algún espejo derrotado, o de alguna luna de día en un lugar ocupado. Permitámonos enloquecer por un momento, encontrar la lucidez velada. Tentemos de una vida horrible, la pasión incluso. Gente real o un interés al trabajo. Miremos a los ojos y amemos, somos reales, anda, preguntemos ¿cuánto me quieres? Troquemos en un extraño, en algún ajeno inadaptado. Disgustemos la parte de depresión y espera, aun a sabiendas que su tiempo es contado, caminemos juntos algún trayecto tremendamente solitario, escapemos de la causa más interesante, de la fe ciega que nos limita, del momento empuñado como alma buena. Hablemos hoy de ti, comienza, por favor, ven dime… ¿Con quién te sueñas?